Rss Feed Tweeter button Facebook button Youtube button
|

Hoy es el Día Mundial del Teatro

Dr. Vicente Maltez Montiel.

Dr. Vicente Maltez Montiel.

• Un arte que continúa retando la represión del espíritu humano
• Es patrimonio de la humanidad
• Mensaje anual sobre la efeméride del gran director Breth Bailey
• ¿Cuándo se integrará a la formación espiritual de todos en Nicaragua?

Dr. Vicente Maltez Montiel (*)

Hace más de dos mil seiscientos años surgieron en Atenas los ritos en honor a Dionisios, dios del vino y la fertilidad, a través del ditirambo, una especie de danza que va a dar origen a esa profunda necesidad del ser humano de representar sus más profundas vivencias y aspiraciones.

Surgen la tragedia y la comedia, de las que se dice todos llevamos algo. No ha faltado quien diga que los humanos estamos provistos de ese recurso del antiguo actor que era la máscara y que al modificar nuestras conductas, según conveniencias y necesidades, adoptamos ese “baile de máscaras” que forma nuestras vidas.

Un representante del teatro, una de las bellas artes clásicas, es Jean Baptiste Poquelin, más conocido como Moliére (1622-1673) quien fue dramaturgo, humorista y actor francés y considerado el padre de la Comedia francesa.

Quinientos años atrás, que es el tiempo de Moliére, la profesión de actor era casi delincuencial, condición de lumpen proletariado, y más aún cuando se procede del seno de dificultades socioeconómicas.

En 1620 Moliére asumió la divisa de los comediantes franceses, “corrige las costumbres riendo”, al tiempo que sostenía que su objetivo era hacer reír “a la gente honrada”.

Su gran talento cómico, voz y mímicas le hicieron ganar el aprecio del rey, lo que valió fundar su propia compañía, no sin soportar las críticas de la poderosa iglesia que se sentía cuestionada por obras como “Tartufo”, donde se criticaba la hipocresía religiosa. Por ello la prohibieron cinco años.

“La escuela de mujeres, El Misántropo, El médico a palos, El avaro, El anfitrión” y muchas más, fueron algunas de sus obras y hasta la fecha es uno de los autores más interpretados.

En la cuarta presentación de su última obra “El enfermo imaginario”, cae en el escenario con una violenta hemoptisis (tosiendo sangre en cantidades masivas).

Fallece por tuberculosis pulmonar, la llamada “peste blanca” que mató en Europa a una de cada siete personas. El día de su muerte el actor vestía de amarillo, por lo cual ha existido la creencia que es de mala suerte vestir de ese color en las tablas.

Aquel 17 de febrero de 1673, la sociedad le cobró su osadía de desafiarla, criticarla y reírse de ella: como era actor no tenía derecho a ser enterrado en el panteón. Un ruego de la esposa ante el rey permitió que fuera sepultado por la noche en la parte del “camposanto” destinado a los niños fallecidos sin bautizarse.

Moliére, al igual que muchos en el pasado y presente, nunca renegó de su profesión considerada inmoral por la iglesia y según se desprende del mensaje anual que desde hace más de 52 años emite el Instituto Internacional de Teatro, con motivo de esta efeméride que patrocina la UNESCO, el quehacer teatral continúa asumiendo duros y difíciles retos, que en algunas partes del mundo amenazan su existencia.

En su mensaje de este año, el gran director Breth Bailey señala que “donde exista la sociedad humana, el irreprensible espíritu de representación se manifiesta. Nacido en la comunidad, lleva las máscaras y las vestimentas de nuestras diversas tradiciones. Utiliza nuestros lenguajes y ritmos y gestos, y aclara un espacio entre nosotros”.

El influyente llamado a la reflexión que se da a conocer en todo el planeta, continúa señalando que en un mundo de poderes desiguales que trata de llevarnos a nocivas actitudes de discriminación por cualquier causa que fuere y que pretende imponer un marco cultural sobre otro, Bailey pregunta: ¿”se puede seguir defendiendo que las artes deben estar sin cadenas frente a la agenda social”?

Y a manera de respuesta y de llamado vehemente, nos recuerda que el teatro, agregaría yo que además la comunicación responsable en general, tienen un poder “de limpiar el espacio en los corazones y las mentes de la sociedad, para reunir a la gente alrededor de nosotros, para inspirar, encantar e informar y crear un mundo de esperanza y generosa cooperación”.

Para todos los teatristas y simpatizantes de este logro del pensamiento social y sentido estético de la humanidad, que es el teatro, nuestras felicitaciones en este Día Mundial del Teatro. Y siempre recordemos lo que dijo Federico García Lorca: “El teatro es poesía que sale del libro para hacerse humana”.

*Especialista en Medicina Interna, químico-farmacéutico y licenciado en Comunicación Social. Autor del libro “Larga vida y prosperidad, consejos de salud”.
Clínica médica calle principal de Altamira, frente a la CECA, (Laboratorio clínico) Teles 2278 0830 y 22670251.
maltezvic@hotmail.com

Archives

Recently Commented

  • Mark Potosme: Que no se vuelva a aparecer en Nicaragua este viejo hediondo. Esos no comen banano por no botar la...
  • Allan Brito: La peor raza de la tierra, sino preguntenle a los paleestinos que sufren un verdadero holokausto por mas...
  • Montecristo: Estas agencias estan infestados de moclines y gays deprabados y son los que imponen las nuevas modas...
  • El Alguacil: La idea nunca fue que nosotros terminemos pagando el impuesto, sino que no entraran productos narcos....
  • MADE IN COLOMBIA: es re gracioso eso que llaman “impuesto patriotico”, al final ese arancel lo termina...