PMA y FAO preocupados por canícula
El Programa Mundial de Alimentos (PMA) y la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), emitieron este martes una declaración donde llaman a priorizar recursos internos y externos para paliar el impacto de la sequía en millones de centroamericanos.
“Consideramos muy preocupante el impacto que la canícula prolongada está teniendo en la seguridad alimentaria y nutricional en algunas zonas de El Salvador, Guatemala, Honduras y Nicaragua”, señalan.
La declaración, firmada por Miguel Barreto, Director Regional del Programa Mundial de Alimentos (PMA), e Ignacio Rivera, Coordinador para Mesoamérica de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), hace hincapié en los millones de personas vulnerables.
“Durante 2014, el Foro del Clima y el Foro de Aplicaciones de Pronósticos del Clima, auspiciados por instituciones del Sistema de Integración Centroamericano, bajo la dirección del Comité Regional de Recursos Hidráulicos, han brindado información continua sobre la prolongación de la canícula y el posible desarrollo de El Niño. Estos Foros especifican que la canícula en ciertas zonas de la región ha alcanzado niveles históricos”, indican.
“De acuerdo al Sistema Global de Alerta Temprana de la FAO y a la Red de Sistemas de Alerta Temprana para la Hambruna (Fewsnet), superficies considerables dentro del corredor seco centroamericano se encuentran afectadas por la sequía agrícola. En línea con lo que reflejan los Sistemas de Información geoespacial, los países han confirmado pérdidas agropecuarias significativas. Las pérdidas agrícolas se refieren mayormente a maíz y frijol.
“Respecto a las pérdidas pecuarias, hasta el momento se reportan pérdidas de peso en los hatos ganaderos. Aunado a estas pérdidas, preocupa la inseguridad alimentaria que ya se experimenta en la región y que – de no tomar medidas – podría agudizarse hacia 2015”, aseguran.
Agregan que los gobiernos de los países han estado atentos a monitorear la situación, realizar evaluaciones y establecer Planes de Acción, que cubren el corto, mediano y largo plazo, acompañados por la FAO y el PMA.
“Además de la recuperación de las capacidades productivas, se da gran relevancia a la implementación de acciones que reduzcan el riesgo agro-climático y contribuyan a la adaptación ante el cambio climático. Para el cumplimiento de este objetivo, los países buscan sinergias mediante la cooperación intra-regional y la cooperación internacional”, indican.