“Los Chigüines” asolan Guanacaste
Las autoridades costarricenses se han tomado muy en serio las andanzas de “Los Chigüines”.
* Autoridades costarricenses presumen que chavalos son originarios de Nicaragua, sin embargo, no existe certeza sobre su país de origen, ya que los cipotes no lo dicen y lo único que se sabe es que quieren irse para El Salvador.
Siete menores que se autollaman “Los Chigüines” conforman una banda que ha sembrado la zozobra en Guanacaste, antigua provincia nicaragüense que ahora pertenece a Costa Rica.
Las autoridades costarricenses presumen que los chavalos son originarios de Nicaragua, sin embargo, no existe certeza sobre su país de origen, ya que los “chigüines” no lo dicen y lo único que se sabe es que quieren irse para El Salvador.
Los “siete diablillos” de entre 8 y 14 años “llegaron a Guanacaste y no precisamente para disfrutar de las playas, sino para sembrar pánico con sus actos de delincuencia que cometen de manera muy violenta”, según publica el Diario Extra.
Todo indica que los menores ingresaron a Costa Rica de forma ilegal hace tres meses. Según la Policía, en al menos cinco oportunidades han sido detenidos y llevados hasta la frontera con Nicaragua.
Las autoridades presuntamente se han negado a recibir al grupo de chavalos ya que se encuentran sin documentos y no brindan información de donde vienen o tienen su arraigo familiar.
Arleth Díaz, jefa de la Policía Municipal de Santa Cruz aseguró que en una oportunidad los menores quebraron los ventanales, destrozaron lo que se les puso enfrente. No revelan sus nombres y cambian sus edades, dos días después que los pusieron en la frontera estaban de vuelta. En una ocasión cortaron a un policía, agredieron a un funcionario del PANI y un abogado; son tremendos”, comentó.
A donde llegan arrasan con todo a su paso, su insolencia, agresividad y son hasta retadores, diciendo que, “si diez veces nos agarran y llevan a la frontera, 10 veces vamos a volver”, lo que se convierte en desafío para las autoridades.
En el Patronato Nacional de la Infancia PANI prácticamente han agotado las intervenciones y sería imposible tenerlos en los albergues ya que empiezan a destruir las instalaciones, atacan al personal que los atiende y no se descarta que contagie a otros menores que están en recuperación.
Debido a esta problemática, las autoridades de Santa Cruz se reunieron este fin de semana en el hotel Cala Luna, playa Langosta, donde se ventiló el asunto en busca de acciones que lleven a poner freno a estos muchachos que aseguran querer irse para El Salvador.
Juan Marín, diputado de Liberación Nacional por Guanacaste, aseguró a DIARIO EXTRA que entre los temas de seguridad tocamos este que tanto nos agobia.
“Ya los devolvieron a la frontera y Nicaragua no los recibe, andan delinquiendo y son extremadamente rebeldes, han estado detenidos y tienen actitudes contra la policía. Si los valoramos y si son nicaragüenses debería hacerse un llamado al Cónsul y embajador en Costa Rica para tomar acciones correctivas antes que se jalen una torta, pues cuando andan en manada son un verdadero problema”, explicó.
Marín agregó que es un tema institucional, pese a que nadie sabe qué hacer debido a que son problemáticos y evitar que se conviertan en un grupo más grande.