Rusia entrenará tropas de Nicaragua
Alexandor Póstnikov, subjefe del Estado Mayor General de las Fuerzas Armadas de Rusia.
Al igual que en los años 80 del siglo pasado, cuando centenares de nicaragüenses cursaron estudios militares en academias militares de la extinta Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas (URSS), Rusia está dispuesta a prestar asistencia a nuestro país en la instrucción de personal militar.
Al menos es lo que propone el subjefe del Estado Mayor General de las Fuerzas Armadas de Rusia, Alexander Póstnikov.
El general Póstnikov, durante su visita a Managua, afirmó que ambos países examinan ya la posibilidad de instrucción de militares nicaragüenses en academias rusas, recoge la agencia Itar Tass. Asimismo, también se planifica ampliar la colaboración en materia de tecnología militar entre los dos países.
Póstnikov presidió la delegación rusa en las festividades en Managua dedicadas al trigésimo tercero aniversario de la creación de las Fuerzas Armadas de Nicaragua, la única delegación foránea invitada oficialmente.
Vale decir que el Ejército de nuestro país mantiene también excelentes relaciones con las fuerzas armadas de Estados Unidos, que desde hace unas dos décadas acogen en sus instalaciones a oficiales de distinto nivel del Ejército de Nicaragua que llegan a especializarse.
Sería interesante ver cómo se las arreglarían para sincronizarse los oficiales de dos escuelas militares tenidas como las más poderosas del mundo.
En la práctica Rusia lleva ventaja en cuanto a influencia debido a los nexos con nuestra actual oficialidad, que se habían roto tras la caída del mundo socialista a finales de la famosa década de los 80.
¿Hay remanentes de aquél pasado que mantuvo al mundo en vilo mientras Estados Unidos y la ahora ex URSS se la pasaban amenazando? Al menos están las huellas en forma del temible fusil Kaláshnikov (los AK en todas sus variedades) que lleva el apellido del campesino soviético que los inventó en 1947.
Hoy el mundo es otro y por fortuna ya no existe la Guerra Fría, aunque para nadie es un secreto que a partir de 1992, la rediviva Rusia ha venido fortaleciendo sus fuerzas armadas con miras a recuperar la gloria y poder perdidos de manera momentánea tras el colapso del antiguo Kremlin de Lenin, Stalin y demás jefes del PCUS.