Fariñas y su grupo listos para fallo judicial
El jueves se conocerá si Henry Fariñas y todos los detenidos por estar presuntamente ligados a su red de crimen organizado, son culpables o inocentes, según dio a conocer la juez Segundo Penal de Juicio, Adela Cardoza.
El Ministerio Público demandó penas máximas en tres supuestos delitos que les imputan a los 21 acusados por tráfico internacional de drogas, lavado de dinero y crimen organizado, incluyendo a un ex magistrado electoral y el empresario Fariñas.
Fariñas, un empresario de clubes nocturnos en Managua, saltó a la palestra internacional por la muerte del cantautor argentino Facundo Cabral, el 9 de julio de 2011 en Guatemala en un ataque presuntamente ordenado por el costarricense Alejandro Jiménez, alias “El Palidejo”.
Cardoza suspendió la sesión la noche del lunes y reiniciará en su fase final el miércoles en horas de la tarde.
El ex magistrado electoral Julio Osuna es acusado además del presunto delito de falsificación ideológica por la emisión de cédula de identidad al costarricense Jiménez, presunto líder de la estructura del narcotráfico en Centroamérica.
Osuna, quien fue despojado de su inmunidad en el Parlamento, habría efectuado los ilícitos entre 2006 y 2007, actuando como “servidor del narcotráfico” y facilitando el traslado de dinero a Costa Rica en vehículos con matrícula oficial, de acuerdo a la versión policial.
Los tres hermanos Fariñas –Karla, Pedro y Henry- están siendo procesados por integrar “una célula” del crimen organizado que operaba en Nicaragua y traficaba drogas en Centroamérica, según la acusación del Ministerio Público.
Los pilotos colombianos Javier Eucastegui y Gonzalo Pérez, presuntamente trasladaban la droga de la agrupación liderada por Jiménez y Fariñas.
La justicia nicaragüense enfrenta el caso más sonado de los últimos tiempos y solo superado por el proceso en contra de 18 mexicanos presuntamente narcotraficantes, detenidos en Nicaragua con 9.2 millones de dólares, el pasado 20 de agosto.
El caso Fariñas se convirtió en una verdadera “caja de Pandora” por los secretos que se conocieron, entre ellos el vínculo que éste y sus hermanas tenían con varios comisionados de la Policía Nacional, lo que fue demostrado con pruebas irrefutables en al menos uno de los casos: fotografías.