Construirán represas para enfrentar sequía
Represas para albergar el agua de lluvia, construirá el gobierno de Nicaragua en zonas más áridas a fin de atenuar los efectos de la sequía ocasionada por el fenómeno “El Niño”.
Estamos “trabajando en un intenso plan para instalar represas en las zonas más frágiles del país, para que cuando llueva, el agua no se pierda, y se pueda represar”, dijo el presidente Daniel Ortega el jueves durante una reunión con directivos del Banco Mundial (BM) que visitan Nicaragua.
La ausencia de lluvias en el país ha puesto en peligro la producción agrícola y ha causado la muerte de unas 2.000 reses en las últimas semanas, informó la agencia alemana Dpa.
Según explicó Ortega, el gobierno se ha reunido con dirigentes de asociaciones de ganaderos y “ya hay un plan donde se pueda ver exactamente en qué comunidades y cuántos productores están siendo afectados, qué tenemos que hacer para que no desaparezca el ganado en esa zona”.
Ganaderos nicaragüenses han señalando que la crisis ocasionada por la sequía podría empeorar en los próximos meses con la inminente llegada del fenómeno “El Niño”. El presidente de la Federación de Asociaciones Ganaderas de Nicaragua (Faganic), Salvador Castillo, dijo que la falta de pastos en el campo ha provocado la muerte de 2.000 cabezas de ganado, lo que incidirá en una merma de la producción de carne, leche y derivados.
Según Castillo, la situación será aún más grave en el llamado “corredor seco”, donde se ubican las zonas rurales de mayor pobreza, ya que la falta de lluvias no ha permitido cultivar suficientes cantidades de arroz, maíz y frijoles, alimentos de consumo básico.
Faganic estima que en todo el país existen 4,1 millones de cabezas de ganado, de las cuales unas 700.000 se encuentran en el “corredor seco” unas 700.000. La cuarta parte de estas podría morir si persiste la sequía. Por su lado, directivos de la Unión de Productores Agropecuarios de Nicaragua (Upanic) pidieron al gobierno un plan de emergencia que permita reestructurar los créditos al sector por parte de los bancos y las microfinancieras.
Según los expertos, la sequía se mantendrá y podría agudizarse a partir de septiembre próximo, pese a que la temporada de lluvias en Centroamérica se extiende habitualmente entre los meses de mayo y noviembre.