Por fin extraditaron al tico Gil Trejos

 

* Resulta interesante el hecho de que la Interpol, quizás sabedora de la influencia que Gil Trejos y su mujer tienen en el gobierno de Costa Rica, haya esperado hasta que ingresó a Nicaragua para solicitar su detención.

Para este viernes a las 11:55 de la mañana, en vuelo de Aeroméxico, estaba previsto el vuelo que se llevaría extraditado a la nación azteca al costarricense José Daniel Gil Trejos, solicitado por la Interpol por causa de un presunto fraude comercial.

Gil Trejos, preso en Nicaragua desde el 26 de mayo pasado, tensó las ya de por sí deterioradas relaciones entre nuestro país y los vecinos del sur, debido a las acusaciones de la esposa del detenido, Marcela Chacón, sobre supuestas violaciones a sus derechos humanos.

Chacón, una ex viceministra de Seguridad y Gobernación en dos anteriores gobiernos ticos, goza aún de mucha influencia en la clase política de su país e intentó forzar una liberación con inventos sobre la salud y la seguridad personal de su marido, maniobras que no surtieron efecto al ser ignoradas por nuestras autoridades.

Chacón, según el diario La Nación, recibió la noticia con una mezcla de actitudes, ya que por un lado ve bien que salga de Nicaragua y vaya a un país donde, según dijo, sí se respetan los derechos humanos y el debido proceso, lo que no es compartido por la ciudadanía tica, que advirtió que en México, Gil Trejos sí sabrá lo que es estar detenido a la par de reos de alta peligrosidad como los narcos, por decir algo.

Por otro lado, Chacón lamentó que Nicaragua no hubiera notificado a la embajada de Costa Rica sobre la extradición. “Se burlaron de Costa Rica hasta el último momento”, dijo la ex viceministra.

Gil fue capturado en Nicaragua después de que la Policía Internacional (Interpol) emitiera una orden de captura internacional y Costa Rica notificara el viaje que él haría a Managua. Así comenzó una detención que, según varios reclamos de la Cancillería de Costa Rica y de la Defensoría de los Habitantes, violó el derecho a asistencia legal diplomática y humanitaria.

Resulta interesante el hecho de que la Interpol, quizás sabedora de la influencia que Gil Trejos y su mujer tienen en el gobierno de Costa Rica, haya esperado hasta que ingresó a Nicaragua para solicitar su detención.

La Defensoría llevó el reclamo a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), e igual hicieron organismos de derechos humanos de Nicaragua.