Everth Cabrera metido en problemas

Miguel Ángel Martin

Este año las cosas no terminan de marchar del todo bien y la suerte no acompaña para nada. Este semana Wieland entraba en la lista de jugadores lesionados por 15 días, convirtiéndose en el undécimo pelotero de los Padres que ingresa en esta desafortunada lista y ahora Everth Cabrera, que veía cerca la posibilidad de poder ser llamado para el equipo grande, ve alejarse esta opción por estar implicado en un caso de violencia domestica, por el que fue detenido y por el que tendrá que responder judicialmente la próxima semana.

Según la policía de Glendale, Cabrera y su esposa Connie fueron detenidos el pasado 16 de marzo en su apartamento en Glendale, siendo el pelotero de los Padres llevado a la cárcel por el delito de asalto con violencia doméstica y más tarde liberado.

Así que, teniendo los Padres a la posición de torpedero en el disparadero, con nueve errores acumulados hasta ahora (y siendo la posición en quien todos se fijaron en la pasada derrota frente a Colorado), además de estar bateando solo para .130, la llegada al equipo de Cabrera desde Tucson parecía más que lógica e inminente.

Está bateando para .325, supera los diez robos de bases, liderando a Tucson en esta estadística y casi alcanza los 40 hits, siendo el segundo mejor del equipo hasta ahora en este aspecto del bate. Y cuatro errores en sus primeros 28 juegos.
Miguel Ángel Martin

Ahora la llegada de Cabrera a San Diego desde Tucson, queda en suspenso hasta que se aclare este asunto vía judicial.

¿Y cómo afectará esto al pelotero de los Padres? No lo sé, pero lo ocurrido transciende lo deportivo y es un asunto muy serio que cala en la sociedad. Un problema tremendo a erradicar en nuestra sociedad, salpica a Cabrera en mayor o menor medida (eso lo determinará la justicia) y le llega en un momento muy inoportuno para su carrera.

Siempre ha sido un pelotero querido entre la fanaticada hispana que le ha apoyado y que ha sentido bastante cuando en los dos últimos años no ha podido hacerse con un puesto en el roster, tras la primavera beisbolística. Así que esta situación delicada es perjudicial para su imagen y para su carrera.

Todo se irá viendo poco a poco, pero lo que parece seguro es que este año no parece que los Padres estén bendecidos con una varita mágica que nos unja de fortuna, como pasó en el 2010.

Hay que seguir afrontando las adversidades que se está poniendo en nuestro camino y hallaremos el modo de afrontar el brillante futuro que nos aguarda con la fuerza necesaria para que nos brinde las alegrías que la fanaticada busca y se merece.