En Colombia juegan a ser los nuevos “Piratas del Caribe”
* Construyen buques de guerra para lanzarlos a aguas nicaragüenses que usurpan desde antes del fallo de la Corte Internacional de Justicia de La Haya
Tras perder un poco más de 90 mil kilómetros cuadrados de mar Caribe que la Corte Internacional de Justicia devolvió a Nicaragua en noviembre del año pasado, Colombia “bautizó” este miércoles el segundo buque militar construido en sus astilleros con el que pretende patrullar aguas nicaragüenses.
El patrullero marítimo artillado sería bautizado este miércoles en Cartagena en una ceremonia que será presidida por el ministro de Defensa, Juan Carlos Pinzón y que tendría como madrina oficial a la primera dama María Clemencia Rodríguez de Santos.
El “7 de Agosto” es un buque construido por la Corporación Tecnológica de Ciencia y Tecnología para el Desarrollo de la Industria Naval (Cotecmar) en Cartagena, según publica el diario El Tiempo.
Segundo buque corsario
Este es el segundo Patrullero de Zona Económica Exclusiva construido en Colombia, luego de que se desarrollara el ARC “20 de Julio”, un patrullero que ha estado principalmente recorriendo las aguas del meridiano 82, pese a que La Haya determinó que esa nunca fue frontera con Nicaragua, por lo tanto, está invadiendo nuestro mar territorial.
El “7 de agosto”, que costó cerca de 118 mil millones de pesos colombianos, tiene dos cañones – uno de 40 milímetros y otro de 20- y una autonomía máxima 10.000 millas náuticas a 12 nudos.
La Armada de Colombia asegura que la construcción del buque, que inició en enero de 2011, generó cerca de 600 empleos directos y 1.100 indirectos. En la ceremonia se presentaría a la primera dama María Clemencia Rodríguez de Santos, como madrina oficial.
Descaro y prepotencia
La plataforma tiene como diseño original la clase Fassmer 80 de Alemania, modificado por Cotecmar en Colombia.
Este buque tiene tres herramientas de interdicción marítima: la plataforma de mando y control, el helicóptero y un bote interceptor de alta velocidad. Entre sus funciones están las de efectuar tareas de soberanía, búsqueda y rescate, atención de desastres, ayuda humanitaria y protección de los recursos naturales.
Sin ningún empacho a su condición de nuevos corsarios del Caribe, Colombia anunció que lo echarán al mar para patrullar aguas nicaragüenses situadas al este del meridiano 82.