Robos de carros y ¿atentados de la CIA?
Es probable que alguna vez en tu vida -sobre todo si tienes ya unos cuantos años- te hayan robado algo en el coche. Pongamos un ejemplo: llegas por la mañana a tu vehículo y… ¡sorpresa! La radio no está. ¿Te suena? Seguro que sí, o si no lo has experimentado en carnes propias, alguien de tu entorno lo habrá hecho.
Esto cada vez es más difícil con los coches nuevos y los nuevos sistemas de infoentretenimiento… en los que la radio suele estar incorporada y no es un aparato físico como tal. Sin embargo, el riesgo de sufrir un robo en un coche es ahora diferente y me atrevería a decir que con los años cambiará aún más… y es que con la llegada de Internet al coche, muchos de tus datos personales están incluidos en tu vehículo.
De hecho, los automóviles modernos están llenos de software informático y como tal, sufren los mismos riesgos que, por ejemplo, podría sufrir tu ordenador. Esto quiere decir que la llegada de virus (y no los que proceden de los estornudos de tu acompañante porque te has pasado con el aire acondicionado) y la posibilidad de que te hackeen el vehículo se convierte en una realidad.
Recientemente, Uber sufrió un ataque informático que vulneró sus sistemas de seguridad para hacerse con los datos de hasta 50 millones de cuentas de usuario, entre las que figuraban nombres, información bancaria… un completo desastre; por otro lado, el transporte público de San Francisco también sufrió un hackeo. ¿Cómo no pensar en la posibilidad que entren en un coche y lo manipulen?
Esto es, precisamente, lo que Wikileaks insinuaba, advirtiendo de que la CIA quería hackear coches para llevar operaciones a distancia. Sí, operaciones del calibre de causar un accidente fatal intencionado, por ejemplo… y culpar a un fallo técnico del coche. Todo esto da mucho miedito… lo sabemos. Como esta situación, que parece sacada de una película de ciencia ficción, es mucho más real de lo que piensas y podría serlo mucho más en el futuro más cercano, no son pocos los fabricantes que piensan en contratar un hacker para tener ‘el enemigo en casa’.
No porque estén planeando hacer el mal, desde luego, si no para descubrir de qué manera podrían hackearse sus coches y cubrir posibles debilidades de sus sistemas operativos. ¡Un movimiento inteligente! El Grupo Fiat fue uno de los últimos en buscar hacker para evitar robos en el coche, pues en 2010 un Jeep Wrangler fue robado debido a que lograron abrirlo usando un simple ordenador.
Robo en el coche: no todo es material…
Ahora sí, pongámonos un poco conspiranoicos y miremos a los coches del futuro. Muchos de ellos prometen ser capaces de medir tus constantes vitales, de saber cómo te sientes en cada momento y de registrar la última vez que aparcaste el coche y dónde (bueno, esto ya ocurre, pero lo harán de manera más sofisticada). No nos gusta pensar mal pero, ¿y si alguna día toda esa información disponible en el coche se volviera en tu contra?
Quién sabe si las empresas podrían acceder a todos esos datos para descubrir cuál es tu estado físico o si de verdad estás o no en casa o en el trabajo, por ejemplo. ¡El control puede alcanzar niveles exagerados! Sí, la privacidad en el futuro está también en juego y un simple robo de información podría saberlo todo de ti, causar una suplantación de identidad o hacer que tu coche autónomo tome recta la siguiente curva. Traga saliva… ¡Glup!
Visto así, igual preferías que te robaran esa radio Pioneer que recibiste al cumplir los 18 años… En fin, que aunque quepa toda esta posibilidad, no dudes que las marcas de coches quieren lo mejor para ti y van a hacer todo lo posible por luchar contra los malos. Así que, de momento y en general, no hace falta que pongas cara de sospecha cada vez que te subas al coche.