El “paquetazo” de la telefónica Claro

La hasta ahora monopólica empresa telefónica Claro, que ofrece los servicios de telefonía convencional, celular, televisión por cable e internet, apareció anunciando un “paquete” dizque para favorecer a sus usuarios, consistente en meter las cuatro facturas en un solo documento.

Realmente no se ve en qué vendrá a ayudar lo anterior a los que compran servicios básicos a Claro, empresa que más bien debería preocuparse por mejorar su caótica red de atención al público que por miles intenta acceder a diario a su planta telefónica o que se persona hasta sus diversas instalaciones.

Cortes injustificados, cobros inverosímiles, quejas por daños en sus redes de distribución que pasan días sin atender, recibos con cargos por servicios que no están brindando, son algunas de las graves anomalías de Claro que hacen que los usuarios acudan a veces casi en masa y furibundos hasta los locales de esta transnacional a reclamar.

Es toda una odisea el tratar que las señoritas que atienden en la planta telefónica – paradójicamente de esta compañía telefónica-, logren pasar al usuario reclamante a la oficina correcta. Pareciera que lo hacen deliberadamente para abultar la factura del pobre ciudadano.

Cuando le dicen al que reclama que lo transferirán a donde le corresponde hacer la gestión, se corta o le cortan la llamada. El quejoso vuelve a marcar y se repite la tortura hasta que alguien de “nivel” da la orden de que el usuario inconforme llegue a una sucursal o a la central, a gestionar lo que bien se pudo resolver con el aparatito de Graham Bell que ha hecho millonarios a tantos.

Y ahora aparece un ensacado ejecutivo a decirnos que en adelante podremos pagar todas las facturas de una vez. ¿Por qué no se preocupan primero por resolver las ineficiencias de una empresa, tan grande, que pareciera salírseles de las manos?

Si uno fuera más dundo, no se percataría de que con el famoso “paquete” lo que están haciendo es enfrentar en parte la amenaza que para su monopolio representa la anunciada inauguración en junio de una compañía rival de capital ruso. Quieren que la gente se “case” con Claro, para que después se vea engorroso pagar recibos de diferentes empresas.