Bebidas azucaradas consumidas de forma moderada no causan sobrepeso
Las causas de la obesidad son multifactoriales
Un reciente estudio de la Universidad Queen Mary en Edimburgo, Escocia indica que el consumo moderado de las bebidas azucaradas no causa aumento de peso, ni efectos adversos en el estado anímico de las mujeres con sobrepeso, según indica una nota de prensa de Crea Comunicaciones.
“Con la epidemia de obesidad en el mundo viene la búsqueda de los supuestos culpables. Se ha dicho en algunas publicaciones que las bebidas azucaradas comprometen el cumplimiento de una dieta balanceada, promoviendo el consumo de más azúcar y aumento de peso”, indica la información.
La información destaca que las causas de la obesidad no se pueden atribuir a una sola, puesto que intervienen múltiples factores. Para ello toman como referencia el reciente informe que publicó la sicóloga Marie Reid, del Departamento de Psicología de la Universidad Queen Mary, sobre el impacto de las bebidas azucaradas en el consumo de carbohidratos, en el aumento de peso y en el estado de ánimo de mujeres con sobrepeso.
En este estudio participaron 53 mujeres con sobrepeso a quienes, durante un mes se les suministró 28 bebidas no identificadas por semana, de las cuales la mitad contenía azúcar y la otra aspartame, sin que ellas supieran cual estaban tomando.
Durante ese período, además se les monitoreaban otros aspectos como alimentación, ejercicio y estado de ánimo.
Según la información, los resultados de la investigación reflejaron que las bebidas azucaradas, consumidas en cantidades moderadas, no causan aumento de peso, ni el consumo excesivo de carbohidratos. Tampoco efectos adversos en el estado anímico de las mujeres con sobrepeso.
“La publicidad sobre los supuestos efectos nocivos del azúcar podría estar generando esos efectos, dado que creer que el azúcar es dañina puede generar emociones negativas después de comer comidas azucaradas y llevar al efecto de violación de la abstinencia (abstinence violation effect). En otras palabras, saber que uno está tomando bebidas azucaradas pensando que ellas son malas para la salud, puede resultar en el abandono de una dieta generalmente saludable y baja en grasa”, indica la sicóloga Reid.
Estos resultados hacen consciencia sobre la importancia de aplicar el factor sicológico en la escogencia de comidas y su repercusión en el peso. Este estudio en particular, demostró que influyó más el efecto sicológico de no saber lo que estaban tomando, que las diferencia en las calorías de las bebidas.
“El consumo moderado de azúcar tiene un papel neutro en una dieta balanceada, pero juega un papel emocional negativo en la psicología de la escogencia de comida”, concluyó la científica.