Colombia preocupada porque no tiene satélites
* Hacen notar que otras naciones como Nicaragua, Bolivia, Chile, Ecuador y Perú, ya decidieron incursionar en el espacio
Argentina, Brasil y México van un paso adelante en la adquisición y desarrollo de satélites artificiales. Bolivia, Chile, Ecuador, Perú y Nicaragua siguen sus pasos. Colombia, mientras tanto, sigue rezagada.
El atraso tecnológico de Colombia en el ámbito aeroespacial aletarga diversos procesos de desarrollo estratégico, asociados al aprovechamiento del entorno espacial. Así lo demuestra un estudio desarrollado por los profesores José Gregorio Portilla y Jonathan Orlando Murcia, investigadores del Observatorio Astronómico de la Universidad Nacional de Colombia (OAN).
En primer lugar, estudiaron el caso de Brasil. Allí, la decisión de adquirir un satélite de comunicaciones propio fue adoptada, en gran medida, por fallas de Intelsat (el mayor proveedor de señales satelitales del planeta), que suministraba los servicios de transmisión de televisión a Brasil en pleno mundial de fútbol de 1982.
Tres años después, el Gobierno puso en órbita Brasilsat A1 (el primero comprado por una nación latinoamericana) y duró once años. Desde entonces y a la fecha, ha adquirido ocho geoestacionarios de comunicaciones.
Argentina compró el primero, en 1997, a compañías europeas: el Nahuel-1. No obstante, desde mediados de los años noventa ha hecho una gran apuesta en concebir, diseñar y fabricar sus propios satélites por medio de la empresa estatal Invap y de proyectos destacables como los de la serie SAC (A, B, C y D), construidos en su mayoría para efectuar observación óptica terrestre (detección de humedad, de incendios e inundaciones, de salinidad del agua, etc.), según cuenta el profesor Portilla, director del OAN.
Otros países de la región también han tomado conciencia de la importancia de tener satélites propios. Este es el caso de Ecuador.
El pasado 14 de abril, el presidente Correa manifestó: “a final de mes se lanzará el primer satélite ecuatoriano y no un satélite comprado a un país extranjero, un satélite hecho en Ecuador”, por iniciativa de la Agencia Espacial Civil Ecuatoriana (EXA).
Se trata de «Pegaso», un nanosatélite de 10 por 10 centímetros, con paneles de 75 centímetros y un peso de 1,2 kilogramos, que se lanzará, desde China, el próximo 26 de abril a la 1 p.m. (hora de Ecuador).
La presencia colombiana en el espacio se ha reducido al satélite «Libertad 1», del tamaño de una hamburguesa, comprado y adaptado por la Universidad Sergio Arboleda. Su puesta en órbita, junto con la de otros trece, se hizo a través de un cohete ruso-ucraniano en abril del año 2007, pero su única función fue emitir una señal de radio durante veintidós días, antes de quedarse sin batería.
A los dos investigadores de la UN les preocupa que Colombia ni siquiera tenga la autonomía de observarse a sí misma desde el espacio. En cambio, un satélite como el VRSS-1, puesto en órbita por Venezuela en septiembre del año 2012, sí puede tener una vista detallada de nuestro territorio y, por ende, recolectar más información de la que el mismo Gobierno colombiano puede obtener. Se caracteriza por tomar fotografías de alta resolución.
Asimismo, resaltan que sólo hasta el año 2006 se creó la Comisión Colombiana del Espacio (CCE) y que esta, hasta la fecha, “no ha mostrado mayor interés en los asuntos que le competen”.