¿Jefes de cárteles en Nicaragua?
Armas enchapadas en oro usadas por capos de la droga.
Procuraduría de México alerta a Centroamérica e incluye a Nicaragua como posible escondrijo de capos de la droga. Sicarios del Istmo copian métodos de asesinato de los mexicanos y todos los ingredientes de grupos criminales convergen en por estos lados.
Algunos de los jefes de cárteles mexicanos de las drogas buscados en esa nación, podrían estar escondidos en Nicaragua y otros países de Centroamérica, dijo en New York el procurador de la nación azteca, Arturo Chávez.
Dicha alerta fue plasmada en un comunicado emitido por la Procuraduría General de México. El procurador señaló que varios jefes de los cárteles de La Familia Michoacana, el de Tijuana, Juárez, El Golfo, los Beltrán Leiva y Los Zetas, podrían estar trasladándose en los últimos tres meses hacia países de Centroamérica.
Y citó como sitios de destino de los capos mexicano a Guatemala, Honduras y Nicaragua. Lanzó una advertencia especial para Costa Rica, en donde están detenidos más de 60 mexicanos relacionados a varios cárteles de droga.
Buscan también control de mercados internos
Las autoridades mexicanas consideran que la preferencia de los jefes de los cárteles en Centroamérica, se debe para controlar el tráfico de estupefacientes de Sudamérica hacia México y los Estados Unidos, y también controlar los mercados internos.
Medios de prensa del país vecino han dejado constancia de la preocupación de las autoridades costarricenses debido a la llegada al mercado local de drogas sintéticas como el “hielo”, “ice o “cristal”, como llaman a las metanfetaminas.
En Nicaragua la Policía ha desmantelado dos laboratorios donde confeccionaban esa peligrosa y costosa droga, e incautado alrededor de 5 millones de pastillas, cada una con valor que oscila entre los 25 y 70 dólares. Si le aplicamos el precio más caro, aquí los narcos tenían solo en metanfetaminas unos 350 millones de dólares.
Costa Rica alerta por metanfetaminas y violencia
Las anfetaminas son elaboradas en laboratorios de México y Guatemala, en mayor medida por los carteles de Sinaloa y la Familia Michoacana, según la Procuraduría de la nación azteca. En Costa Rica reportan problemas de jóvenes con adicción a dicha droga, la que consideran de rápida adicción.
En nuestra vecina del sur también están a la expectativa de un aumento en la violencia debido a la rivalidad, la cual es evidente en las calles mexicanas.
Y es que el comportamiento del crimen organizado se parece cada vez más al de México. En Honduras, por ejemplo, se reconocía ayer que se ha fracasado en el plan contra los sicarios que se mueven impunemente en motocicletas ejecutando a los enemigos de sus jefes.
Tan solo en lo que va de la semana dos personas han sido asesinadas desde motos en marcha en Tegucigalpa. Una de las medidas de control implementada por las autoridades desde el 15 de abril pasado, es la prohibición de que dos hombres viajen en una misma moto y adelantar por la izquierda a los vehículos.
Asesinaron a reguetonero
Los sicarios aprovechan cuando sus víctimas están haciendo un alto o esperan el cambio de luz en un semáforo. Es lo que lo ocurrió el lunes pasado al cantante de reguetón de Tegucigalpa, Robert Steven Pérez Rodríguez, 21, conocido como “Pery”.
Fue asesinado en su automóvil cuando iba camino a la Universidad en el bulevar Suyapa de la capital hondureña, por sujetos a bordo de una motocicleta que le dispararon con pistolas. No hay detenidos.
“Matar a Messi”
En países como México es tan común la muerte en circunstancias violentas, que Guillermo Franco, argentino de nacimiento pero mexicano de corazón, según él mismo dice, aseguró en broma durante una entrevista para el diario ‘El Clarín’ que para poder detener al mejor jugador del mundo Lionel Messi “hay que pegarle un tiro”.
«Hay que pegarle un tiro», dijo Franco al periodista. «Sí, le voy a pedir a Dios y voy a orar. Pero cómo parás a un crack como él. Es imposible. Es el mejor jugador del mundo. Tiene mil variantes, velocidad, técnica, frena, arranca… Hay que tratar de marcarlo lo mejor posible, pero es un grandísimo jugador».
De inmediato se desataron las críticas contra el futbolista, a quien incluso recomendaron que si quería matar a Messi, buscara a José Jorge Balderas Garza, alias El JJ, el sicario del narcotráfico que disparó a la cabeza del portero paraguayo Salvador Cabañas, en el baño de un bar, presuntamente por una discusión sobre fútbol.