¿Mejor solo que mal acompañado?

* Hoy es el Día Mundial de los Solteros

Dr. Vicente Maltez Montiel

Cada día 13 de febrero se conmemora en el mundo el día mundial de las y los solteros, precisamente en la víspera del 14 o día de San Valentín dedicado a promover el amor y la amistad.

Los cambios demográficos, culturales y psicosociales vienen transformando la tradicional concepción que se tiene de la soltería, que ha sido estigmatizada desde varios puntos de vista, al tiempo que diversas investigaciones sociológicas y sexológicas afirman que se vive más y mejor en la condición de casados.

Es más, se afirma que usted puede vivir hasta 17 años menos en la condición de soltero porque el cáncer, estrés y enfermedades cardíacas hacen blanco en esas personas que dicen haber asumido la tesis de que “es mejor vivir solos que mal acompañados”.

La imagen de las comedias del cine y el protagonista de uno de los más escuchados programas radiales, que es “Aniceto Prieto”, son resistentes al matrimonio. Ahí está Lupita esperando que Aniceto deje de ser un vago para asumir la reiterada promesa matrimonial que jamás cumple. ¿Por qué?

Simplemente porque en el mundo cada vez las personas se casan menos y buscan soluciones alternativas, por lo cual se afirma que el matrimonio pierde adeptos. Es probable que leyes punitivas y muy justas como la 779, que castiga la violencia contra la mujer, también sean un efectivo método disuasivo contra la decisión de acudir al juez a “formalizarse”.

Por ejemplo, en Estados Unidos se han reducido las mujeres que se casan, de un 44% (1982) a un 36% en el período 2006-2010. La tendencia es casarse lo más tardío posible.

Algunos estudios afirman que las parejas vinculadas por la unión de hecho “experimentan una mayor felicidad y autoestima a mediano y largo plazo que casados”.

No olvidemos que en nuestro país la unión de hecho es una de las formas legales de vivir en pareja, aunque no la más aceptada. En algún momento que la sociedad evolucione favorablemente en su pensamiento, se darán uniones legales de las personas del mismo sexo.

Usted se convierte en soltero por el hecho de nunca haberse casado, ser viuda o viudo o estar divorciado. A veces leemos que estar “separado” es otra forma de estar soltero, pero el hecho jurídico es que continúa casado y persisten las obligaciones derivadas del matrimonio (pensiones alimenticias para hijos y esposas, etc.) aunque modifique su estilo de vida por las vías de hecho respetando o no sus obligaciones.

Psicología y temores del soltero

Hay varios estereotipos que se han modificado con el tiempo. Por ejemplo, que todas las mujeres están “desesperadas” por casarse. En Estados Unidos las damas se unen en matrimonio como promedio a partir de los 26 años.

La sexología tradicional solía afirmar que la soltería después de los 35 años, en especial en varones, “era altamente sospechosa de homosexualidad”, idea que tiende a ser revisada.

Algunas sociedades han cargado de impuestos a los solteros y parecieran ser más benévolas con los casados en materia fiscal.

Los prejuicios contra la soltería parecen atenuarse con los celibatos de las órdenes religiosas, tan controversiales y llenos de acusaciones de abuso sexual contra menores hoy en día, al extremo que Naciones Unidas ha formalizado sus acusaciones contra el Vaticano de proteger en el mundo la pedofilia de sus subordinados.

Entre las principales motivaciones o inspiraciones para permanecer solteros o solteras encontramos:

• Tener libertad para asumir riesgos sociales, económicos y físicos: viajar, cambiar de trabajo y vivienda sin tener que preguntarse que su deseo de autorrealización o placer pueda molestar o perjudicar a segundas y terceras personas.
• A otros simplemente les gusta estar solos. Más de la mitad de las viviendas en Francia y otros países de Europa están formadas por un solo habitante.
• El temor a que el matrimonio acabe en divorcio.
• La libertad sexual y las restricciones de la monogamia. Pero no olvidemos que un informe de encuestas del comportamiento sexual de Estados Unidos en 1991, reporta que hasta un 70% de los hombres y un 35% de las mujeres ha tenido al menos una vez relaciones sexuales fuera del matrimonio.
• Registran problemas particulares para encontrar trabajos porque los empleadores prefieren a las personas que “tienen una obligación”, es decir que se considera más responsables a los casados. Muchas compañías que venden viviendas prefieren a los casados.
• Otro aspecto es la aceptación de los amigos y la sociedad. Muchas veces vemos “el acoso” de la familia y la constante pregunta: ¿Cuándo te vas a casar? ¿Cuándo vas a ser una persona seria? Esto suele ser más dramático en el caso de los hijos únicos, cuyos padres manejan la expectativa de poder conocer y amar a sus nietos o nietas.
• Un “estigma” frecuente es que los solteros son solitarios, aunque el 20% de ellos o más resiente la soledad. Se les considera promiscuos sexuales o la otra consideración que va de “sospechosos” o de conducta homosexual. En definitiva, aspectos que afectan la autoestima de estas personas.

Soltería y salud

Suele hacerse la pregunta comparativa de qué es mejor: el vivir soltero o casado. Recordemos el controversial lema de la celebración del día de los solteros, de que es mejor vivir solo que mal acompañado. Quizás una forma pesimista de ver la vida.

Destacan los siguientes aspectos concluidos en diversas encuestas sobre la salud de los solteros:

Duermen mejor pero suelen ser más “viciosos”, porque consumen con mayor frecuencia y en mayor cantidad sustancias tóxicas de todo tipo como alcohol, drogas, etc.

Cuidan mejor su aspecto personal, ya que tienen que estar “listos” para la conquista. Se dice que el casado y la casada aumentan de peso.

La Universidad de Oslo en Noruega (2011) ha concluido que los solteros tienen mayor incidencia de cáncer, que la depresión y ansiedad los afectan más, al extremo que se habla de cifras en relación con la vida: los solteros viven 17 años menos y las solteras tienen una reducción de 15 años de vida.

Los estudios sociológicos parecieran apuntarse a que es mejor la vida de casados, pues afirman que los varones en esta condición tenemos los huesos más fuertes, aunque tengamos 3 kilogramos más en promedio, pero sufrimos menos estrés, fumamos y consumimos menos alcohol que los solteros.

Una de las explicaciones del beneficio de casados parece ser que los cuidos son mejores y mayores y me refiero a los cuidos mutuos, lógicamente en matrimonios “bien llevados”.

Estas líneas introducen al ánimo del amigo y amiga lectora elementos de reflexión. Usted es dueño de sus propias decisiones y al igual que le decimos al bebedor que maneja un automóvil: beba con responsabilidad que en su casa lo esperan, a la soltera y soltera le decimos: viva con responsabilidad y plenitud, sin temores, que la vida es maravillosa y esperamos y le deseamos pueda disfrutarla.

Larga vida y prosperidad para todas y todos los solteros, y nuestro pueblo.

*Especialista en Medicina Interna con postgrado en sexología. Licenciado en Química-Farmacia. Autor del libro “Larga vida y prosperidad, consejos de salud”.
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