Gobierno normaliza compra de “energía limpia”
El gobierno de Nicaragua normalizó sus compras de energía limpia que inesperadamente redujo la semana pasada con fuertes pérdidas a empresas generadoras que suministran energía eólica y de biomasa al sistema de interconexión local, confirmó el domingo una fuente empresarial.
El presidente del Consejo Superior de la Empresa Privada (Cosep), José Aguerri, en declaraciones a una radioemisora local aseguró que los parques eólicos y los ingenios azucareros operan con normalidad, después de que el gobierno nicaragüense reasumiera las compras normales de energía eólica y de biomasa generada a partir del bagazo de caña de azúcar.
Dirigentes del Consejo Superior de la Empresa Privada (Cosep) reaccionaron alarmados a principios de la semana pasada después de que el gobierno de Daniel Ortega recortara el consumo de energía limpia de 220 a 75 megavatios de energía, alegando “problemas técnicos” de la Empresa Nacional de Distribución Eléctrica (Enatrel).
La reducción del consumo de este tipo de energía provocó pérdidas de medio millón de dólares por día a cuatro parques eólicos y dos ingenios azucareros, que redujeron sus operaciones tras la reducción del consumo por parte del gobierno de Ortega, informó la agencia alemana Dpa.
“Se ha normalizado la generación eólica y de los ingenios. Alcanzamos acuerdos para resolver los problemas técnicos. Ya están en plena capacidad trabajando en la generación de energía tanto en los ingenios, como en las generadoras eólicas” dijo el dirigente empresarial, José Adán Aguerri,
En 2014, Nicaragua consumió un 52,44 % de energía proveniente de fuentes renovables y un 47,56 % de derivados del petróleo. Desde el año 2007, Nicaragua inició un ambicioso programa de transformación de su matriz energética, que dependía en más de un 80 por ciento del consumo de combustibles fósiles, por energías limpias.
En tanto, el gobierno de Ortega anunció recientemente que analiza la situación del mercado petrolero para decidir en abril próximo se reduce o no los precios de las tarifas energéticas, tras la caída de precios de los hidrocarburos.