Revés al IFE
El 13 de septiembre el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (Trife) dictaminó por unanimidad dar la razón a la Cámara Nacional de la Industria de Radio y Televisión (CIRT), al PRI y al PVEM en su controversia contra el IFE.
Así, se viene abajo el Reglamento de Acceso a Radio y Televisión en Materia Electoral, aprobado en el Consejo General del Instituto Federal Electoral (IFE) el 27 de julio.
La disputa se centraba en el desacuerdo de los quejosos con la resolución del IFE que acortaba los tiempos para que los medios electrónicos difundieran los spots de los partidos en el espacio oficial.
El IFE acordó que pasará de cinco a tres días el tiempo que tendrían los medios para poner al aire los spots en caso de la entrega del promocional por vía electrónica y de tres a dos días cuando se hiciera en el domicilio de los medios.
La posición de los magistrados es que el IFE no consultó a los concesionarios y permisionarios de la radio y televisión antes de tomar la decisión y que tampoco presentó un dictamen técnico que sostuviera la factibilidad de la medida. Así, el Trife dio la razón a los demandantes, que aseguraban no haber sido consultados y que no estaban en capacidad técnica de cumplir con el nuevo reglamento. El dictamen sostiene que para tomar una decisión en esta materia «es necesario» que el IFE consulte con el sector.
Una vez que se conoció la sentencia, el presidente del IFE, Leonardo Valdés, hizo público que el Instituto la acataría. Ante la resolución, queda ahora vigente el ordenamiento en la materia aprobado en el 2008.
Es un claro golpe a la autoridad del IFE y una victoria de la CIRT, el PRI y el PVEM. La instancia electoral, en su alegato con la CIRT vía los medios, sostuvo que había dialogado con los concesionarios y permisionarios y también que había presentado un sólido estudio de factibilidad.
La resolución del Trife pone en duda la credibilidad del IFE. De ella se desprende que el IFE mintió y la CIRT dijo la verdad. Le toca acatar la resolución, es su obligación, pero tiene también que dar pruebas de que se reunió con los integrantes de la CIRT y presentó un buen dictamen técnico.
Una cosa es que no haya pasado lo que dice el IFE -lo cual sería grave- y otra que los magistrados, están en su derecho, hayan valorado que lo hecho por el IFE no fue suficiente. Se trata, en todo caso, de cosas claramente distintas. Los magistrados votaron unánimemente en favor de la resolución que favorece a la CIRT, el PRI y el PVEM. Esto indica que no hubo posiciones distintas o se pudieron conciliar. Es prueba también de que a los magistrados les pareció débil la argumentación del IFE y fuerte la de quienes interpusieron la demanda.
Rubén Aguilar Valenzuela