“Pegan” a Fariñas con droga y éste acusa a “El Palidejo”

“Ellos (Alejandro Jiménez y Elgin Vargas) siempre hablaban de cocaína y la comercializaban aquí en Guatemala con un tal zacapaneco, y me imagino que la otra persona era el señor Henry Fariñas, porque supuestamente el ataque fue por una deuda de drogas”, expresó José Benedicto Cerón De la Cruz.

Esta declaración forma parte de su testimonio en calidad de anticipo de prueba como colaborador eficaz ante el juez quinto de Instancia Penal, Marco Villeda, en el proceso contra los presuntos asesinos del cantautor argentino Facundo Cabral.

La diligencia se realizó por medio de videoconferencia y a puerta cerrada en el sótano de la Torre de Tribunales.

Fariñas le “echó” Policía en Nicaragua

En su declaración, el testigo recordó que Fariñas “le echó la policía en Nicaragua y, por eso, se hicieron allanamientos en Nicaragua en propiedades de Alejandro Jiménez”, sugiriendo que sería uno de los motivos del enfrentamiento entre los aludidos, adicionalmente a la deuda de drogas.

Cuando el Ministerio Público (MP) preguntó a Cerón si sabía con quién comerciaban el narcótico, respondió: “Ellos (Alejandro Jiménez y Elgin Vargas) siempre hablaban de cocaína y la comercializaban aquí en Guatemala”.

Más adelante volvió a insistir en que Elgin Vargas realizaba trabajos de transporte de estupefacientes y dinero en Guatemala. “Le ayudaba (a Alejandro Jiménez) a llevar sus vehículos a un taller para hacerles doble fondo, los cuales eran utilizados para transportar dinero y drogas hacia Esquipulas (Chiquimula), frontera con Honduras, en donde era paso de drogas de Alejandro Jiménez, por ejemplo, en cantidades de $50 mil”, señaló Cerón.

También relató que dos meses antes del 9 de julio 2011, fecha del asesinato de Cabral, Jiménez, alias “El Palidejo”, se contactó con Vargas para pedirle apoyo para contratar personas que le dieran muerte a Fariñas. Fue hasta el 8 de julio que Jiménez y Vargas se comunicaron, y el primero le brindó información sobre la dirección de la residencia de Fariñas.

Por compra de Elite

En su declaración, el empresario nicaragüense Fariñas manifestó que para él todo se inició luego de que Jiménez le ofreciera comprar el club nocturno Elite en varios millones de dólares, en efectivo, y él le pidió que fuera por medio de transacciones bancarias.

Aunque reconoció que él lo conoció como José Treviño, y no como Alejandro Jiménez, de lo cual se enteró en los medios de comunicación, “es con la única persona (José Treviño) que tuve una diferencia por la intención de una compra del club Elite, porque ofreció pagar en efectivo millones en dólares y se le propuso que fuera por transferencias bancarias. Ante esto, el señor me dijo que yo lo había engañado y este es el único problema que puedo decir que tuve”, afirmó el empresario nicaragüense.

Fariñas, de origen nicaragüense, declaró a través de videoconferencia en el Juzgado Quinto Penal, que controla la investigación. Por medidas de seguridad no se informó el lugar desde donde brindó su declaración.

Fariñas relató que el problema con Jiménez se debe a que no se concretó la venta de dos centros nocturnos del grupo Élite, ubicados en Costa Rica y Nicaragua.

Explicó que “El Palidejo” le ofreció una suma millonaria, que no precisó, por los dos negocios. “Las negociaciones empezaron en Managua y hubo otras en Guatemala”, dijo.

Según Fariñas, Jiménez insistía en pagar en efectivo, pero él le exigió que le depositara el dinero en una cuenta bancaria. Aseguró que el costarricense se negó y optó por alejarse. Fariñas supone que eso originó la decisión de matarlo.

Por esa misma situación, Jesús Barrios, supuesto integrante del grupo de Jiménez, amenazó de muerte a Rafael Velásquez, gerente del centro nocturno ubicado en Costa Rica. Para evitar cualquier desenlace fatal, Fariñas decidió enviar de vacaciones a Barrios.

Amenazas

Fariñas insistió ante el Juzgado que Jiménez lo amenazó de muerte en reiteradas ocasiones, debido al negocio fallido.

El empresario nicaragüense afirmó que el dueño mayoritario de esos centros nocturnos es un estadounidense que decidió constituir una sociedad anónima. “Yo declaro en memoria de Facundo —Cabral—, que era mi amigo. Yo admiraba su música”, expresó.

Lo incrimina

En tanto, un colaborador eficaz, piloto de Elgin Enrique Vargas Hernández, quien fue contactado por Jiménez, dijo que Fariñas se dedica al trasiego de drogas y eso determinó que el costarricense ordenara su muerte.

“Jiménez planificó la muerte del empresario —Fariñas— cuatro meses atrás”, relató. El ataque se registró el 9 de julio último en el bulevar Liberación, zona 12. El colaborador refirió que la muerte de Fariñas debía ser en Guatemala, para no originar sospechas.

Jiménez es investigado en su país por lavado de dinero. Un juzgado de Alajuela, de donde es originario, denegó una orden de captura internacional en su contra, por falta de pruebas.

La familia de “El Palidejo” se dedica a vender verduras, pero en los últimos años ha amasado una fortuna de la cual sospechan las autoridades de ese país, ya que adquirió una residencia valorada en más de US$1.5 millones.

sigloxxi.com y prensalibre.com