Osazuna también tiene fans en Nicaragua
Al otro lado del «charco», en Centroamérica, Nicaragua lucha contra la pobreza desde que los primeros rayos del sol inauguran las mañanas. En una pequeña ciudad nicaragüense, Ciudad Darío, los niños sueñan con ser Patxi Puñal.
La Fundación Osasuna, en colaboración con la Fundación Juan Bonal, desarrolla allí desde 2006 un programa de ayuda a los alumnos de la escuela de música, los jugadores de la escuela de fútbol, el taller de carpintería y el comedor social, que alimenta a 68 niños y cuatro ancianos al día, gracias a la ayuda de las Hermanas de la Caridad de Santa Ana.
Cuando a finales del mes de agosto la Fundación Osasuna se puso en contacto con El Drogas, ex de Barricada y cantante de Txarrena, para versionar con los niños de Nicaragua su canción, Rojo, éste no se lo pensó dos veces.
Voló hacia allí para comprobar, de primera mano, la labor que el club rojillo ejerce con los más necesitados. «El trabajo que realizan cada día y cada noche me pareció alucinante», cuenta El Drogas, «todos me preguntaban por Patxi Puñal o Ricardo.
Llevé una camiseta firmada por los jugadores y los niños se me acercaban y me decían a quién pertenecía cada firma. Me quedé alucinado de cómo tienen allí al equipo. Había pósters de Osasuna por todo. El penúltimo día que estuve allí, jugaba el equipo de la Escuela de Fútbol Osasuna San Antonio.
Ver a nicaragüenses vestidos de rojillos y cómo sentían la camiseta me impactó. En unas gradas viejas, la gente animaba cantando la canción que estábamos preparando. Ahí me dije, tengo que hablar con Pachi Izco para que algún jugador de Osasuna vaya allí. También llamé a Puñal. Necesitaba contarles lo que había visto».
Ayer, Osasuna rubricó el nuevo acuerdo entre Fundación Osasuna y la Fundación Juan Bonal en un acto que contó con la presencia de El Drogas. Nicaragua seguirá latiendo con un corazón rojillo.
diariodenavarra