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Más preocupaciones: Asociación Demencia Alzheimer y Covid-19

Dr. Vicente Maltez Montiel, médico internista.

Dr. Vicente Maltez Montiel, médico internista.

Dr. Vicente Maltez Montiel*

* 21 de septiembre Día Mundial de Lucha Contra el Alzheimer.

Las Demencias se consideran problema de Salud pública mundial y de 50 millones de enfermos 50-70% padece Enfermedad o Demencia de Alzheimer (EA) y en próximas décadas (2050), tendremos 131.5 millones de afectados de una dolencia de causa desconocida, crónica, progresiva, costosa, cargada de prejuicios y discriminaciones y que impacta con violencia a familias y cuidadores de los pacientes.

Una nueva preocupación experimenta la Humanidad con la aparición de los pandemia de Covid-19, lo cual se plantea cuando como de costumbre conmemoramos, por iniciativa de la OMS, un Día Mundial (21 de septiembre) de lucha contra la Enfermedad de Alzheimer (EA), considerada una Epidemia del siglo XXI.

La EA es una enfermedad mental incurable en la cual se produce degeneración de las células nerviosas del cerebro y se reduce su tamaño, lo cual se va a manifestar en deterioro cognitivo o intelectual, siendo destacado en primer lugar la pérdida de la memoria, lo cual se asocia con alteraciones del comportamiento, lenguaje y juicio. No hay tratamiento ni forma de detener su avance.

La enfermedad pudiera detectarse veinte años antes de su aparición, cuando comienzan a surgir olvidos que cada vez se vuelven más persistentes. Hay dos grandes factores de riesgo como son edad avanzada y a más edad mayor riesgo, (a partir de 60 años), por ejemplo, de 80 años encontramos 20-40% de afectados. Además, hay historia familiar de esta dolencia. La edad y antecedentes familiares marcan tendencia, como vimos en el emblemático caso del escritor García Márquez fallecido por esta causa.

El médico internista, ante un caso sospechoso de demencia, descarta si estamos frente a un caso de demencia curable: caso de algunos tumores, infecciones y derrames cerebrales, alcoholismo, mal funcionamiento del tiroides y depresión del anciano, entre otros.

Debemos estar atentos si nuestros adultos mayores presentan no solo dificultades para aprender, opinar o emitir juicios sobre lo cotidiano, sino también si antes de 70 años se presentan conductas atípicas como vandalismos, caídas, hurtos, pedofilia o parkinsonismo que pudieran ser la forma de presentación de la EA.

En una etapa temprana destacan tendencia al olvido, pérdida de la noción del tiempo y se manifiestan desubicadas de no saber dónde se encuentran, incluso en lugares conocidos. Cuando la EA avanza en etapa intermedia esos olvidos aparecen en acontecimientos recientes, incluso olvidan nombre de personas con las que conviven. Puede ser que se pierda la persona dentro de su propia casa, le va costando hablar y asearse, por lo cual solicita apoyo. Llama la atención que hay cambios en el comportamiento como andar dando vueltas o repetir las mismas preguntas.

La etapa tardía está caracterizada por graves alteraciones de la memoria e inactividad física. Es una persona con creciente desubicación del tiempo y espacio, no reconoce familia ni amigos, es obligatorio que alguien le ayude a su aseo personal, no puede caminar y su comportamiento puede presentar episodios agresivos con cualquier persona.

Podemos prevenir la EA manteniendo un estilo de vida saludable que conlleve dieta con frutas, verduras y con menos carnes rojas, ejercicio regular, poniendo a funcionar la mente y consumiendo vitaminas E, jengibre, curry, cúrcuma, Omega 3 y alejándose de sustancias toxicas. Evite cocinar en ollas y sartenes de aluminio.

En los tiempos de Covid-19 hay preocupación por tres razones: las personas que sobreviven esta infección tienen alto riesgo de padecer de EA en el futuro, aquellos que ya están enfermos de EA pueden sufrir consecuencias incrementadas de un mayor deterioro cognitivo como resultado del aislamiento, falta de tratamientos y chequeos médicos.

Hasta un 36% de pacientes afectados del Covid-19 resultan con problemas neurológicos y deterioro intelectual (cognitivo) durante la hospitalización y después del alta hospitalaria, lo que se va a manifestar en forma de insomnio rebelde, delirios, confusión, depresión o ansiedad, según comprueban las experiencias de los estudios realizados en España, Italia, Francia y China.

Saludo a todos los pacientes nicaragüenses y del mundo afectados de la Demencia de Alzheimer. Continúo expresando mi admiración y reconocimiento al médico académico Dr. Eddy Zepeda, estudioso nicaragüense y pionero de las demencias de nuestro país, quien junto a personalidades altruistas han materializado la Fundación de Alzheimer de Nicaragua (FADEN) organización sin fines de lucro que viene desarrollando un trabajo de apoyo integral de estos pacientes.

*Especialista en Medicina Interna de la Clínica de Especialistas Dr. Maltez. Rotonda del Periodista 3 cuadras al lago y 3 cuadras arriba. Previa cita de Lunes a Sábado. Teléfonos: 8854-7884 / 8903-6211 / 2223-4333.

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