Estudiantes reciben certificados de Tocfl del idioma mandarín
En el auditorio Hugo Chávez del Tecnológico Nacional-Inatec, el embajador de Taiwán, Jaime Chin-mu Wu y el subdirector del Inatec, Walter Sáenz, presidieron este 9 de febrero el acto de entrega de certificados del Examen TOCFL(Test de Chino-Mandarín como Lengua Extranjera 2020 y del curso Chino Mandarín A1 de Inatec, a 17 estudiantes del idioma.
Asistieron también Ángela Munguía, vicedecana de la Facultad de Educación e Idiomas de Unan-Managua, y Ronald Torres, director de UNI-IES.
En su intervención, el subdirector Sáenz agradeció el apoyo incesante de Taiwán en las distintas áreas de desarrollo de Nicaragua, entre ellas destaca la capacitación de sus profesionales. Asimismo, expresó sentirse muy contento de ver una considerable cantidad de nicaragüenses aprobando el examen del idioma chino mandarín, señalando que esta es una muestra de los frutos concretos que dan la cooperación entre Nicaragua y Taiwán.
Por su parte, el embajador Wu dio la bienvenida a los estudiantes del idioma mandarín a unirse en la familia de esta lengua. Explicó que a pesar que aprender el idioma chino mandarín, especialmente su escritura, pueda parecer un inmenso reto para los aprendedores, de hecho existe una lógica que facilita el aprendizaje.
Por ejemplo, los caracteres para montañas(山), luna(月)y ríos(川, son pictogramas, es decir, toman forma de los objetos que indican; también redactó un cuento en que un anciano contemplaba cortar un árbol (木) que tenía en su patio encerrado(囗, porque eso formaba la forma de la palabra atrapado(困), pero después de ser recordado por su hijo, se dio cuenta que sin el árbol, la forma de la palabra solo quedaría con un hombre(人)encerrado, lo cual significaría prisionero(囚), así que finalmente abandonó la idea.
Resaltó que hay muchos cuentos fascinantes que ayudan a memorizar las palabras, y animó a los estudiantes a continuar sus estudios, recordándoles que también podrán optar a aplicar a las becas que ofrece el gobierno Taiwanés para seguir desarrollándose, y conocer a este país que siente tanto cariño por Nicaragua.
Por su parte, Laurel Arcia Herrera, una de las calificadas del examen, comentó en chino mandarín, que si bien es difícil este idioma, pero todo lo bueno en la vida lo es, invitó a todos asumir el reto de estudiar este bello y enriquecedor idioma que ampliará sus experiencias de vida, asegurando que terminarán amando el chino mandarín.