Impacto de volcán y tormenta en aseguradoras de Centroamérica
Sobre la base de un análisis preliminar, Fitch considera que la industria de seguros en Guatemala, Honduras y El Salvador no se vería significativamente impactada por los siniestros asociados a las cenizas expulsadas por la erupción del volcán Pacaya de Guatemala, el día jueves 27 de Mayo del presente año, y por la tormenta tropical “Agatha” que afectó la zona norte de Centroamérica los dos últimos días del mismo mes.
Fitch considera que el índice de siniestros netos retenidos por las aseguradoras, debería mantenerse en rangos manejables considerando los adecuados niveles de reaseguro y de reservas de contingencias catastróficas que mantienen la mayoría de las aseguradoras de estos países. Por ende, en opinión de Fitch, las calificaciones asignadas a las empresas de seguros generales en Guatemala, Honduras y El Salvador, no deberían verse afectadas por estos eventos.
Sin embargo, en opinión de Fitch, debe considerarse el hecho que la tormenta Agatha sucede justo a inicios de la época lluviosa en la región, lo que deja a estos países en una situación más vulnerable ante próximas tormentas durante el año, cuando exista una mayor saturación de humedad. Por lo tanto, Fitch no descarta que estos mercados cierren el año 2010 con desviaciones mayores en sus indicadores de siniestralidad relacionadas con eventos similares, lo que a su vez podría traducirse en un mayor costo de las coberturas de reaseguro catastrófico, riesgos potenciales respecto de los cuales Fitch se pronunciaría en la medida que se materialicen.
La depresión tropical inició en la costa de Guatemala el sábado 29, e inmediatamente se transformó en la tormenta “Agatha”. Si bien los vientos no superaron las 45 mph, dejó más de 35 centímetros de lluvia en partes de Guatemala, El Salvador y Honduras, y causó pérdidas humanas, inundaciones y deslaves. Por su parte, la erupción del volcán Pacaya generó expulsión de cenizas, por lo que la coincidencia de ambos eventos en Guatemala ha causado más daño en ese país.
A pesar de las lamentables pérdidas humanas y las de carácter económico, la baja penetración de seguros en la región resultará en un limitado nivel de pérdidas aseguradas, con lo cual los efectos sobre la rentabilidad o capitalización de las empresas calificadas serán mínimos. De igual manera, es oportuno tener en cuenta la acotada prioridad que mantienen la mayoría de aseguradoras de la región en sus contratos catastróficos con entidades de reaseguro internacionales, niveles que en promedio no superan el 2.7% del patrimonio, y que además en los tres países existe la exigencia regulatoria de acumular reservas de contingencias catastróficas.
Por lo tanto, la expectativa de Fitch es que los siniestros originados por estos eventos en que incurran las aseguradoras de estos países por la erupción volcánica y la tormenta tropical serán absorbidos en su mayoría por entidades reaseguradoras extranjeras, y que los montos deberían ser fáciles de absorber por los reaseguradores. En este sentido, Fitch destaca que históricamente los reaseguradores han cumplido con sus obligaciones de manera oportuna frente a grandes siniestros e incluso catástrofes ocurridos en estos países.
Fitch enfatiza que el proceso de evaluación se encuentra aún en desarrollo, considerando lo incipiente de la información, por lo que estimaciones más precisas serían emitidas en las próximas semanas. Fitch se encuentra en un proceso de recopilación de información por parte de los diversos agentes de mercado, incluyendo el grupo de compañías de seguros generales que clasifica, con el fin de reevaluar la situación.
Fuente: Fitch Ratings Centroamérica